Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El pasado 20 de enero, la presidenta Castro felicitó a Trump por su investidura como el 47 presidente de Estados Unidos y expresó su confianza en que ambos países seguirán “consolidando” su relación bilateral.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El pasado 20 de enero, la presidenta Castro felicitó a Trump por su investidura como el 47 presidente de Estados Unidos y expresó su confianza en que ambos países seguirán “consolidando” su relación bilateral.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
En un mensaje en la red social X, Reina indicó que por instrucciones de la presidenta Xiomara Castro, se convocó “a una reunión de emergencia virtual” con los embajadores hondureños en Estados Unidos, Guatemala y México, con el objetivo de “definir estrategias para atender las necesidades derivadas de la nueva administración del presidente Donald Trump, y proteger los derechos humanos de los migrantes hondureños en estos países”.
“Estas medidas incluyen la colaboración con países amigos, además de brindar asesoría legal a los migrantes”, añade el escueto mensaje.
Tensa relación entre Honduras y EE. UU.
El pasado 20 de enero, la presidenta Castro felicitó a Trump por su investidura como el 47 presidente de Estados Unidos y expresó su confianza en que ambos países seguirán “consolidando” su relación bilateral.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, convocó este miércoles “a una reunión de emergencia virtual” a los embajadores de su país en Estados Unidos, Guatemala y México, para “definir estrategias” ante las medidas migratorias anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
En un mensaje en la red social X, Reina indicó que por instrucciones de la presidenta Xiomara Castro, se convocó “a una reunión de emergencia virtual” con los embajadores hondureños en Estados Unidos, Guatemala y México, con el objetivo de “definir estrategias para atender las necesidades derivadas de la nueva administración del presidente Donald Trump, y proteger los derechos humanos de los migrantes hondureños en estos países”.
“Estas medidas incluyen la colaboración con países amigos, además de brindar asesoría legal a los migrantes”, añade el escueto mensaje.
Tensa relación entre Honduras y EE. UU.
El pasado 20 de enero, la presidenta Castro felicitó a Trump por su investidura como el 47 presidente de Estados Unidos y expresó su confianza en que ambos países seguirán “consolidando” su relación bilateral.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
El canciller hondureño, Enrique Reina, indicó que estas medidas incluyen la colaboración con países amigos y brindar asesoría legal a los migrantes.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.
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Foto: cortesía de redes sociales
El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, convocó este miércoles “a una reunión de emergencia virtual” a los embajadores de su país en Estados Unidos, Guatemala y México, para “definir estrategias” ante las medidas migratorias anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
En un mensaje en la red social X, Reina indicó que por instrucciones de la presidenta Xiomara Castro, se convocó “a una reunión de emergencia virtual” con los embajadores hondureños en Estados Unidos, Guatemala y México, con el objetivo de “definir estrategias para atender las necesidades derivadas de la nueva administración del presidente Donald Trump, y proteger los derechos humanos de los migrantes hondureños en estos países”.
“Estas medidas incluyen la colaboración con países amigos, además de brindar asesoría legal a los migrantes”, añade el escueto mensaje.
Tensa relación entre Honduras y EE. UU.
El pasado 20 de enero, la presidenta Castro felicitó a Trump por su investidura como el 47 presidente de Estados Unidos y expresó su confianza en que ambos países seguirán “consolidando” su relación bilateral.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal“, indicó Castro en un mensaje en X.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.
Críticas
El mensaje de Castro fue criticado por políticos de la oposición, empresarios, organizaciones de migrantes y otros sectores que consideran que puede perjudicar a miles de hondureños que viven de manera ilegal en Estados Unidos.
Además, creen que Estados Unidos podría suspender la ayuda económica que le ha venido brindando a Honduras.
Las remesas familiares que los migrantes hondureños enviaron en 2024 rozaron los 10,000 millones de dólares, que representan entre el 25 y 30 % del Producto Interno Bruto (PIB), según diversas fuentes.
Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares, en un espacio compartido con hondureños.
Trump prometió desde su campaña una deportación masiva de inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, que comenzaría el día de su investidura.