La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Los tres condenados que no se beneficiaron del perdón presidencial fueron Djokhar Tsarnaev, uno de los autores del ataque contra la maratón de Boston en 2013, Dylann Roof, un supremacista blanco que mató a nueve personas negras en una iglesia de Charleston en 2015, y Robert Bowers, condenado por matar a once personas en una sinagoga de Pittsburgh en 2018.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Biden está en contra de la pena de muerte y durante su gobierno el Departamento de Justicia emitió una moratoria sobre las ejecuciones en el sistema federal, que es distinto de las condenas emitidas por los jueces en los estados.
Los tres condenados que no se beneficiaron del perdón presidencial fueron Djokhar Tsarnaev, uno de los autores del ataque contra la maratón de Boston en 2013, Dylann Roof, un supremacista blanco que mató a nueve personas negras en una iglesia de Charleston en 2015, y Robert Bowers, condenado por matar a once personas en una sinagoga de Pittsburgh en 2018.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Los 37 reos quedan ahora condenados a cadena perpetua “sin posibilidad de libertad condicional”, precisó el demócrata Biden en el comunicado.
Biden está en contra de la pena de muerte y durante su gobierno el Departamento de Justicia emitió una moratoria sobre las ejecuciones en el sistema federal, que es distinto de las condenas emitidas por los jueces en los estados.
Los tres condenados que no se beneficiaron del perdón presidencial fueron Djokhar Tsarnaev, uno de los autores del ataque contra la maratón de Boston en 2013, Dylann Roof, un supremacista blanco que mató a nueve personas negras en una iglesia de Charleston en 2015, y Robert Bowers, condenado por matar a once personas en una sinagoga de Pittsburgh en 2018.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
El presidente estadounidense, Joe Biden, conmutó este lunes las penas de 37 de los 40 condenados a muerte por la justicia federal, a menos de un mes del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, anunció el mandatario saliente.
Los 37 reos quedan ahora condenados a cadena perpetua “sin posibilidad de libertad condicional”, precisó el demócrata Biden en el comunicado.
Biden está en contra de la pena de muerte y durante su gobierno el Departamento de Justicia emitió una moratoria sobre las ejecuciones en el sistema federal, que es distinto de las condenas emitidas por los jueces en los estados.
Los tres condenados que no se beneficiaron del perdón presidencial fueron Djokhar Tsarnaev, uno de los autores del ataque contra la maratón de Boston en 2013, Dylann Roof, un supremacista blanco que mató a nueve personas negras en una iglesia de Charleston en 2015, y Robert Bowers, condenado por matar a once personas en una sinagoga de Pittsburgh en 2018.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, en una foto de archivo. (EFE)
El presidente estadounidense, Joe Biden, conmutó este lunes las penas de 37 de los 40 condenados a muerte por la justicia federal, a menos de un mes del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, anunció el mandatario saliente.
Los 37 reos quedan ahora condenados a cadena perpetua “sin posibilidad de libertad condicional”, precisó el demócrata Biden en el comunicado.
Biden está en contra de la pena de muerte y durante su gobierno el Departamento de Justicia emitió una moratoria sobre las ejecuciones en el sistema federal, que es distinto de las condenas emitidas por los jueces en los estados.
Los tres condenados que no se beneficiaron del perdón presidencial fueron Djokhar Tsarnaev, uno de los autores del ataque contra la maratón de Boston en 2013, Dylann Roof, un supremacista blanco que mató a nueve personas negras en una iglesia de Charleston en 2015, y Robert Bowers, condenado por matar a once personas en una sinagoga de Pittsburgh en 2018.
Entre los beneficiados hay nueve condenados por matar a otros prisioneros, cuatro por asesinatos cometidos durante robos a bancos y uno que mató a un guardia penitenciario.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lo lamento por las víctimas de sus actos despreciables y me duele que muchas familias hayan sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo Biden.
“Pero guiado por mi conciencia y mi experiencia… estoy más convencido que nunca de que debemos poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal”, agregó.
Durante el primer gobierno del magnate republicano (2017-2021), Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
En los últimos seis meses de su mandato hubo 13 ejecuciones a nivel federal, más que cualquier otro presidente estadounidense en 120 años.
La última se llevó a cabo mediante inyección letal en una prisión de Indiana, en enero de 2021, cuatro días antes de que Trump dejara la Casa Blanca.
La pena de muerte fue abolida en 23 de los 50 estados de Estados Unidos y en otros seis (Arizona, California, Ohio, Oregón, Pensilvania y Tennessee) rige una moratoria.